lunes, 24 de abril de 2017

dB y Audicion Humana

A pesar que el oído humano dispone de protección contra ciertos tipos de ruido, no hay defensa cuando el nivel de ruido se encuentra igual o por encima de los 120 decibeles. Un decibel (dB) es la medida de la presión acústica sobre el oído humano.

Ejemplos de niveles de decibeles en la cotidianidad:

Silencio: 0
Hojas de árboles en movimiento: 20
Conversación: 60
Trafico de la ciudad: 80
Sirena de ambulancia o policía: 90
Aspiradora o licuadora: 100
Motocicleta con escape abierto: 100
Concierto de rock o Techno: 120
Discoteca: 130
Martillo neumático: 130
Despegue de avión a reacción: 150
Explosión de artefacto: 180


El sonido se vuelve dañino a los 75 dB y doloroso alrededor de los 120 dB. El oído necesita algo más de 16 horas de reposo para compensar 2 horas de exposición a 100 dB. Si llega a los 180 dB en determinadas circunstancias puede llegar a causar sordera permanente.

El oído humano tiene un tiempo de reacción de 30-40 milésimas de segundo que es una limitación en sí, dado que es muy poco tiempo para proteger al oído del ruido.

Respecto de la música, la combinación de tres factores diferentes podría tener como resultado una alteración de audición después de escuchar música:

1)    La duración del tiempo de escucha.
2)    La cercanía a la fuente de sonido.
3)    Lo alto del volumen que se escuche la música.

No importa cuánto suba el volumen de la música, la norma general es que cuanto más tiempo la escuche, mayor será el estrés de los músculos del oído interno. La fatiga de los oídos puede tener como resultado un desplazamiento temporal del umbral auditivo, limitando la cantidad de sonidos de tono bajo que puede llegar a oír. Y cuanto más someta a sus oídos a esta fatiga, mayor será la probabilidad de que sufra una alteración de audición permanente.

En una perdida de audición, inducida por el exceso del volumen en la música. se produce un daño en las celulas ciliadas del oído interno debido a la exposición a dB altos. Como consecuencia se reduce la capacidad de las células ciliadas de recoger y transmitir los sonidos a la corteza auditiva.

Las causas de perdida de audición relacionada con la música se debe principalmente a escuchar música con volumen alto en ambientes cerrados, estar cerca de una bocina (altavoz) o por uso excesivo de auriculares.

La perdida de audición se puede prevenir bajando el volumen de los aparatos de sonido principalmente los portátiles, reduciendo el tiempo de exposición a volumen alto y utilizar protectores auditivos.

Muchas personas se preguntan si se puede recuperar o curar la perdida de audición inducida por ruido. La respuesta lamentablemente es que no. Una vez que se dañan las celular ciliadas no pueden recuperarse. Por lo que es bueno mejor la prevención!!!.