miércoles, 24 de enero de 2018

Cuerdas y Musica

¿Recuerdan cuando de niños nos enseñaron en la escuela que la materia estaba formada de átomos? ¿Y que dichos átomos estaban formados por partículas diminutas… protones, electrones y neutrones?. Pues ahora resulta que hay una teoría llamada de cuerdas que sugiere que las partículas que conforman los átomos no son puntos, sino minúsculos filamentos vibrantes, en que cada uno vibra con pautas diferentes que dependen de su masa.

Serían filamentos pequeñísimos, del orden de 10 a la menos 33 centímetros, un billón de billón de veces más pequeños que un átomo. Si pudiéramos ampliar alguna de estas partículas veríamos cuerdas vibrantes. Entonces la materia y todo lo que existe no es más que armonía creada por cuerdas vibrantes.

Esto les gustará a mis amigos los músicos; además, a través de estas cuerdas vibrantes puede construirse un número infinito de formas de la materia. Como composiciones musicales.

El universo es vibración como lo somos nosotros, cada molécula del universo tiene una frecuencia única y el lenguaje que emplea para hablar con el mundo es una onda resonante. Esta teoría se postula para tratar de combinar la relatividad general con la mecánica cuántica, ya que se describen todas las partículas conocidas en las cuatro fuerzas.

La cosa se complica cuando se explica que, para que esto ocurra, para que las ecuaciones se cumplan, es preciso que el Universo tenga más espacios de los que percibimos, Nosotros percibimos largo, ancho y profundidad. La teoría de cuerdas implica dimensiones adicionales, siete más, para que en total sumen diez. En la teoría M, hay once dimensiones.

Nosotros no vemos estas dimensiones adicionales porque están compactadas, se pliegan sobre sí mismas a escalas tan minúsculas que no pueden ser observadas. Hasta aquí lo más elemental y fácil de comprender de la teoría de cuerdas. A los músicos les encantará saber que cada cuerda, cada átomo y cada molécula tocan notas que están siendo oídas en todo el universo.

 El físico Michio Kaku afirmó que “desde hace tiempo trabajo en esta teoría, que se basa en la música o pequeñas cuerdas vibrantes que nos dan las partículas que vemos en la naturaleza. Las leyes de la química con las que hemos tenido problemas en la escuela secundaria serían las melodías que se pueden ejecutar en estas cuerdas vibrantes. El Universo, así, sería una sinfonía de estas cuerdas vibrantes… sería música cósmica resonando a través de este nirvana a través de las 11 dimensiones híper espaciales”.